Hoy me desperté
y sentí los brazos huecos.
Estalactitas de miedo explotaban en mi pecho
y gritos en rio salpicaban de mis ojos.
La rutina susurra mi nombre
pero ya no quiero
no quiero salir
la luz es mentira
no hay un nuevo día
si todo es igual.
Había escrito algo pero se ve que no.
ResponderEliminarQuizá fue la luz que me engañó.